Y es que ella, tan indecisa, tan impulsiva, se lanza al vacío con la esperanza de que al caer esos brazos la tomen sin esfuerzo, y que le den la confianza para no tener que lanzarse una vez más. Pero el Miedo la abraza, le confiesa cada noche que esos brazos no permanecerán en el momento de su caída, y sin pensarlo, ella, cobarde rechaza cualquier sentimiento e intenta hacer como si nada.
Pero cada noche, la Duda , invade su cama haciendo que ella, aprensiva, derrame lágrimas y no deje que el sueño se apodere de ella, es entonces cuando miles de preguntas le rondan por la mente, “¿Es cierto que solo el primer amor es verdadero?, ¿Podré volver a enamorarme?”... Y sin esperar respuesta, continúa el resto de los días de la misma forma.
Y es que ella, tan impulsiva, tan indecisa, no necesita respuesta, sino una solución, una solución que permita que el Miedo deje de perturbarla cada noche y que la Duda , deje que el Sueño se apodere de ella, y que encuentre esos brazos al final de ese precipicio que la tomen con fuerza, que no la dejen caer y que una vez este segura, puedan dejarla en tierra e ir de la mano sin Miedo ni Duda, solo ellos dos.
Id never sing of love
If it does not exist...